Todos los amantes de las series llevábamos oyendo hablar de Westworld alrededor de un año. Expectantes, veíamos como salían rumores, filtraciones y noticias que saciaban nuestras ganas, pero en el fondo lo único que hacían era dejarnos con la miel en los labios. Llegó Octubre, y con él todos los seriéfilos hicimos lo que más nos gusta: dejar los rumores a un lado y pasar a la acción. Por fin se estrenó uno de los títulos mas esperados de la temporada, HBO presentaba su nueva joya.
Una Trama llena de incertidumbre
Westworld se nos presenta como una serie de ciencia ficción, pero haríamos mal en pensar que sólo es eso. Desde un principio se ha dejado claro, si no directamente, si de manera sutil, que Westworld va a ser la sucesora de Juego de Tronos, y a la vista están todos los esfuerzos realizados para su producción.
En parte, se quiere seguir con esa esencia de tramas y subtramas que tanto nos gustan de poniente, pero tocando temas totalmente diferentes. Por eso me niego a decir que Westworld está pensada para ser su sucesora, Westworld ha sido creada para ser ella misma, y eso sí, para hacer que HBO mantenga su hegemonía seriéfila.
Volviendo a la propia serie, se nos presentan dos mundos diferentes, uno el que podemos llamar «mundo real», los que manejan y dirigen una atracción que, tanto las personas de la serie como nosotros los espectadores, somos los encargados de disfrutar. Y un mundo virtual. Paradojicamente, este mundo virtual creado en forma de antiguo oeste, será el foco de conflicto por el que la serie avanzará, como también el punto de conexión entre la vida real y virtual.
Justo en esto reside el atractivo de la serie, no solo nos cuentan una simple historia, si no que entran en conflicto varios ideales como el poder, los intereses personales, y en el campo de la ciencia, la creación de vida y conciencia simplemente como diversión dentro de un negocio, que como comprobaremos poco a poco, se convertirá en un problema que será difícil de solucionar.
Unos personajes muy complejos
Si el cocktail de diferentes tramas que he expuesto anteriormente no te han convencido, la complejidad de los personajes y el apoyo en su desarrollo como pilar esencial de la serie, lo harán por completo.
Tenemos personajes para dar y tomar, desde científicos y empleados de la empresa creadora del parque virtual, todos ellos con subtramas personales, y con al parecer, intereses que terminarán entrando en conflicto. Tenemos los llamados anfitriones, que son las «personas» creadas por la empresa que se limitan a estar en el parque para ser parte de las tramas que disfrutarán los huéspedes.
Dentro de la categoría de anfitriones, la máxima exponente y protagonista de la serie, o por lo menos parte muy importante de ella, es Dolores. Dolores es una joven que vive con su padre y que poco a poco su consciencia irá avanzando a la par que muchos de los otros anfitriones. Algo con lo que sus creadores tendrán que lidiar, aunque en el caso de Dolores, puede que no sea del todo un problema o algo casual, aquí reside una de las tramas más interesantes de la serie.
También tenemos a los huéspedes. Las personas que pagan por ir al parque a disfrutar y a vivir una nueva experiencia. En principio, para disfrutar de la verdadera función del Parque, diversión, aunque en cada capitulo que avanza vemos como esto queda cada vez más en duda.
Dentro de los huéspedes, tenemos al personaje interpretado por Ed Harris que promete ser parte importante de la serie. Lleva mucho tiempo asistiendo al parque, y asegura que está en busca de un nivel superior, algo secreto de lo que nadie ha formado parte. Y por encima de todo, tenemos el personaje interpretado por el grandísimo Anthony Hopkins. Dueño y fundador de la empresa creadora de Westworld, personaje un tanto oscuro e incierto, que poco a poco veremos como crece y va cogiendo importancia en la historia.
La disparidad de personajes y su complejidad, mezclada con la multitud de tramas que nos presentan en sus sólo 5 episodios, nos dejan totalmente satisfechos y enganchados a la nueva serie de éxito hasta tal punto de poder afirmar que lo han conseguido, HBO tiene nueva joya.